BOCADILLO DE VINO

Bocadillos, montaditos, aperitivos, canapés, tapas, raciones, tostadas, pintxos ... 
Conocidos comúnmente como bocado, refrigerio, piscolabis, tentempié y tantas otras identidades impuestas por esa gente enamorada del momento de almorzar. 

Junto con la merienda, es uno de los momentos mas esperados del día, tu imaginación se luce y te deleita con exquisitos manjares de brillantes colores y sabores...

Puedo recordar almuerzos y meriendas, con ingredientes muy creativos y originales, 

aquellos bocadillos de mantequilla con azúcar, de miel (todo tú, entrabas en estado pegajoso, ¡imposible abrir el bocadillo!)  y por supuesto, quien se lleva la palma, bocadillos de vino con azúcar, ¡para chuparse los dedos! 

Unas rebanadas de pan, mejor si son del día anterior, un chorrito de vino tinto y mucha azúcar. Al acabar empiezas a hacer tontunas como que vas piripi, ¡todos se ríen contigo!

Hoy en día, la mayoría de padres no aprobaría que su hijo merendara vino, es más, nos trataría de locos, no sería correcto, muchísimo mejor un bollicao o un donuts, o quizá un doble whopper...
Solo sé que lo hemos probado, nos ha gustado y no nos hemos muerto.

  
 ¡¡¡Viva el vino!!!